En el comedor has de buscarte un lugar de espaldas a la pared desde donde puedas controlar el lugar: no es que vayas a tener ya de buenas a primeras un problema, pero de cuando en cuando a alguno se le va la olla y se lía a bandejazos con el que tenga a mano. En otras ocasiones, por un cobro de deuda o cualquier otra disputa, puedes terminar encontrándote en la mitad de una reyerta con pinchos incluidos (armas punzantes fabricadas a partir de cualquier trozo de metal), por lo que te aconsejamos no dar nunca la espalda al corredor.
Las zonas más peligrosas de los módulos son las que se eligen por lo difícil de su control por parte de los funcionarios y son los lugares escogidos para las peleas y los ajustes de cuenta. Son las siguientes:
- Tigres (servicios de la planta bajo o patio)
- Duchas del patio o gimnasio.
- Escaleras.
- Corredores.
- Pasillos.
- Celdas.