Submitted by jorge on Tue, 07/08/2012 - 08:56
¿Cabe la posibilidad, tras la salida de la cárcel, de reincorporarse, no solo a la vida social, sino también a una vida pública y política activa?
Pues en la generalidad de los casos, NO.
Pero hay ciudadanos y ciudadanos. Y Mario Conde, nos agrade, o por el contrario, no sea objeto de nuestra devoción, es uno de esos personajes capaces de reincorporarse de pleno a esa libertad con mayúsculas.
Y hábil como es, ha elegido la única senda posible para irrumpir en la sociedad y, con el correr de los tiempos, tiempos que ya corren, entrar por la puerta de servicio en la política activa: el humanismo, su aparente humildad, su toque espiritual adquirido durante largas horas de introspección en prisión, etc.
¿Será una fachada cara al respetable? ¿La propia política permitirá que asome su faz? ¿La sociedad en general ha perdonado su pecado?
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/08/06/espana/1344262970.html