Submitted by jorge on Mon, 17/07/2017 - 06:24
El artículo de hoy versa sobre los estudios universitarios que realiza Javier García Gaztelu, alias Txapote, en prisión.
No sabemos si sale a relucir el caso de este etarra en prisión debido a la conmemoración del asesinato de su víctima, Miguel Ángel Blanco, o es pura casualidad, el caso es que se mencionan sus estudios universitarios en Psicología en la cárcel en que reside, Huelva II.
Son escasos los presos que son capaces de realizar sus carreras universitarias en la cárcel y, qué decir, de los que consiguen licenciarse y que no llegan a la docena anualmente, en general, todos ellos matriculados en la UNED y, algunos, en la UOB (Universitat Oberta de Catalunya)
El caso de los presos etarras estudiantes es diferente.
Hasta el 2003, estos presos vascos estudiaban todos a través de la UPV (Universidad del País Vasco), ente que les “facilitaba y suavizaba” las pruebas y exámenes cuando eran ellos los examinados, no así al resto de internos que lograban con mucha dificultad inscribirse en dicha UPV –para ciertas asignaturas-, por lo que desistían o elegían otros estudios en la UNED.
Por ello, el Gobierno modificó en el 2003 la Ley General Penitenciaria, obligando a los etarras a inscribirse en la UNED en caso de querer cursar los estudios universitarios y controlar de esta manera los títulos logradosen igualdad de condiciones con el resto de reclusos.
Con ello terminó el trato de favor a este colectivo preso, aparentemente, porque los exámenes se realizan en las prisiones donde más presos etarras residen, teniéndose que trasladar el resto de estudiantes presos a examinarse a dichas centros penitenciarios, al igual que los profesores, que acuden a esos lugares y en 2 días realizan todos las pruebas.
A favor de estos internos vascos hay que decir que son los más organizados, constantes y cumplidores a la hora de sacar adelante una carrera universitaria, siendo el porcentaje de licenciados entre su colectivo alto, no así el resto de internos estudiantes que, en la mayoría de las ocasiones, abandonan sus estudios antes de su finalización por desidia, cambio de modulo o prisión o su salida en Libertad.
Realizar Estudios Superiores en prisión es tarea harto complicada para el gran porcentaje de internos.