Submitted by jorge on Fri, 11/09/2020 - 06:26
Una historia propia de viernes aunque esta carezca de humor siendo, por el contrario, desagradable e inhumana.
Una pobre chica de 19 años aquejada de Coronavirus fue trasladada junto a otra infectada por la misma enfermedad a los hospitales que les correspondía en la India (desconocemos la ciudad y la provincia)
Una vez el conductor de la ambulancia dejó a la segunda paciente en el hospital que le había sido asignado, se dirigió con la ambulancia al segundo hospital a ingresar a la joven, aunque durante el trayecto desvió su camino, alejándose a una zona deshabitada.
Ahí la violó, llevándola seguidamente al hospital que le correspondía, no sin antes pedirle perdón y solicitar encarecidamente que no contará los hechos.
Una vez la joven fue ingresada, puso al tanto de la violación a los facultativos que dieron la voz de alarma a la Policía que de inmediato investigó el caso y dio con el culpable, Noufal, una persona con antecedentes por intento de asesinato en 2019.
Por supuesto que el imputado está detenido y este hecho ha creado un gran revuelo en la India, donde organizaciones feministas han vuelto a poner el grito en el cielo por la cantidad de violaciones que diariamente aparecen en la prensa y donde la presidenta de la Comisión de Mujeres de la provincia de Kerala, M.C. Josephine, insistía “que no se debe permitir que personas con antecedentes penales tengan acceso a puestos relacionados con la lucha contra el Coronavirus”.
Es llamativo ver como los agresores sexuales no tienen ningún tipo de reparo a la hora de llevar a cabo su crimen, ni por edad, ni motivado por la enfermedad que pueda tener su víctima, ni por las suplicas de éstas.
Seguimos insistiendo, que a este tipo de delincuentes no se les aplique ningún tipo de beneficios penitenciarios y que una vez cumplida la condena, sigan vigilados por un largo periodo de tiempo, ya que estos personajes, en la mayoría de la ocasiones, reinciden una vez salen desaforados de prisión.
