Submitted by jorge on Thu, 20/02/2014 - 10:18
¿Cómo puede ser, que un individuo acumule 15 denuncias por abusos sexuales a menores, algunas de las cuales datan del 2006, y haya aparecido otra denunciante que fecha el acoso hace casi 20 años, y nadie del entorno del acosador, mujer, hija, director del centro, otros maestros, amigos, se haya percatado de la deformación de este… perturbado?
Pues, sinceramente, no nos lo creemos, no damos crédito a lo declarado.
Alguien tuvo que saberlo, algún rumor tuvo que trascender en los centros educativos, runrunes que se acallaron, se taparon por intereses económicos y sociales.
No podemos considerar que los conocedores de los hechos tengan idéntica calificación y merezcan castigo semejante al del sujeto en cuestión, pero sí que callando por interés han podido provocar daños irreparables en menores que quizás nunca lo superen.
¡Qué asco con el dichoso, “¿qué dirán?”!
http://ccaa.elpais.com/ccaa/2014/02/18/madrid/1392748730_056857.html
http://www.elcorreo.com/vizcaya/rc/20140218/sociedad/profesor-valdeluz-pudo-abusar-201402182025.html