Submitted by jorge on Wed, 24/04/2019 - 06:45
Como los violadores profesionales reciban esta noticia, habrá overbooking en los cruceros marítimos internacionales.
Nos parece una situación demencial, pero las Leyes son las que son y desde la derogación en 2014 de la Justicia Universal, cada país ha de cargar con su propio mochuelo.
Resulta que en un barco que realizaba un crucero por el Mediterráneo, en su tránsito entre Valencia y Mallorca, un joven italiano y ya de madrugada, entabla una conversación con una menor inglesa de 17 años, tras lo cual, la convence y posteriormente la fuerza a ir a su camarote, lugar donde la viola.
La joven pone en conocimiento de sus padres el hecho que a su vez denuncian al italiano ante el Capitán del crucero que avisa a la Autoridad Portuaria quien a su vez da la voz de alarma a la Policía Nacional y al Juzgado de Guardia de Valencia.
Con posterioridad, la Policía Científica toma muestras biológicas del camarote del italiano, mientras la joven inglesa es sometida a una exploración en un hospital de Valencia que confirma la violación.
Pero, sorpresa, cuando detuvieron al joven y trataron de imputarle el Delito de Violación, la Policía se percató que además de extranjero, no tenía residencia en España, al igual que la víctima inglesa, además de lo cual, la agresión sexual se había cometido en aguas internacionales, por lo que el delito no se podía juzgar en nuestro país.
Por lo tanto, quedó de inmediato en Libertad y sin cargos.
Una locura legal, pero es así; lo que lo tenemos claro es que lo hiciera de manera premeditada y calculada conociendo la Ley que lo eximía de ser detenido en España o todo le salió de chiripa.