Submitted by jorge on Wed, 24/06/2020 - 06:26
Sí, han sido de las empresas que más crecieron durante una época que apenas salía la gente de casa, por lo que los pedidos a domicilio se multiplicaron de manera inimaginable unos meses atrás.
Por ello, los jóvenes que realizaban las entregas vía bicicleta, moto o coche eran de las pocas personas que tenían autorización para desplazarse libremente por las calles, y esto dio pie a que algún espabilado aprovechara la oportunidad de agrandar su negocio y, sobre todo, de no perder sus clientes de siempre.
Uno de los mayores centros de pedidos por teléfono y entrega a domicilio y con más de 20 repartidores era un TELECOCA radicado en Madrid y que abastecía a un amplio espectro de clientes en diversos barrios de la capital.
Para lograr detener y ubicar esta estructura empresarial con todos los centros de entrega, sus teleoperadores, encargados y repartidores que en ella trabajaban, se necesitaron meses de investigación y más de 250 agentes que, simultáneamente, realizaron los 21 registros en los centros y detuvieron a las 28 persona involucradas.
Otro Telecoca que operaba en Madrid y Valencia era dirigido por 2 jóvenes que funcionaba de igual manera, con teleoperadores pero con la diferencia de utilizar empresas de distribución legales para camuflar la droga dentro de los pedidos de comida.
Todas estas variantes de teledistribuidores, han realizado su gran negocio durante esta época y los grupos de traficantes que no desearon perder su hegemonía y cuota de mercado en la calle tuvieron que readaptarse y encontrar la salida a través de este medio.
No obstante, las penas que impondrán a todos estos detenidos serán similares o iguales a las que aplicarían a los traficantes al uso, esos que venden las dosis en los puntos de venta conocidos y trafican al estilo habitual; el que hayan utilizado el método del telefonito y la entrega a domicilio no les eximirá de cumplir las penas.