Submitted by jorge on Fri, 18/12/2015 - 06:51
Aún nos encontramos con informaciones que nos sorprenden.
Que un millonario saudí salga indemne de una violación a una joven en un juicio en Arabía Saudí, se entiende. Sus Leyes religiosas y sociales permiten ciertos “desmanes” que pueda tener un hombre con una mujer, máxime, si ese hombre es saudí, millonario y bien relacionado.
Pero que esta misma violación se lleve a cabo en Gran Bretaña y se juzgue en Londres, y que tras 30 minutos de deliberación el Tribunal absuelva al supuesto violador bajo el argumento de éste de haber penetrado a la joven por accidente, "cuando tropecé y me caí encima de ella”, no solo es inverosímil, sino que este Tribunal nos trata, a los ciudadanos que asistamos a través de los medios de comunicación perplejos a este circo, de memos o algún descalificativo más grave.
Es una vergüenza que unos jueces ingleses absuelvan a este violador, perdón, presunto violador, por ser un promotor inmobiliario saudí poderoso en la City, con excelentes relaciones y medios económicos ilimitados.
Cada vez los anglosajones se parecen más a nosotros, los españolitos.