Submitted by jorge on Tue, 10/04/2018 - 06:43
Que unos padres ancianos tengan que denunciar ante la Policía a su hijo por agresiones físicas y amenazas, es triste y una demostración palpable de los derroteros que ha tomado de un tiempo para acá nuestra sociedad.
Fue el padre el que llegó a la Comisaría de Policía a denunciar a su hijo por tener amenazada a su madre, motivo por el cual los agentes lo acompañaron al hogar familiar a fin de convencer al hijo a deponer su actitud.
Muy al contrario, atacó, cuchillo en mano a los agentes que lograron desarmarlo y llevárselo detenido.
El Juez le impuso una orden de alejamiento de la casa de sus padres, tras lo cual, lo puso en libertad.
Sin embargo, al día siguiente regresó al domicilio paterno y volvió a amenazar a sus padres, por lo que la Policía lo detuvo por el delito de malos tratos en el ámbito familiar y lo puso a disposición familiar.
Con estas 2 detenciones, el imputado lleva 15 por malos tratos en el ámbito familiar.
O el Juez actúa con contundencia y penas ejemplarizantes -que como siempre insistimos, no han de ser de prisión, sino de cursos, terapias, programas específicos y trabajos en beneficio de la Comunidad-, o personajes como este, volverán a actuar de idéntica manera, de nuevo, con sus padres o con las familia y amigos más cercanos a él.
Este tipo de delitos solo se curan con el ejemplo, las terapias y encontrar un significado a la vida, no con el castigo de reclusión.