Submitted by jorge on Mon, 25/03/2019 - 06:45
Un hombre que en 1992 contaba 31 años de edad, vivía con su novia y con la hija de esta de 5 años, esperaba a que la madre se ausentara para realizar tocamientos a la niña y que esta le practicara felaciones.
Cuando la niña cumplió 12 años, la llevó un día a su habitación, la desnudó y la violó, amenazando con matarla a ella y a su madre si comentaba el caso.
Así continuó esa situación familiar 1 año más, en total 8 años, hasta que la menor cumplió los 13.
Ya en 2015 y cuando la niña convertida en una mujer de 28 años de edad denunció el caso, el hombre fue detenido y el Ministerio Fiscal solicitó 18 años de prisión y 15.000 euros de indemnización para él.
Después de la celebración del juicio, la sección 5ª de la Audiencia Provincial de Murcia ha absuelto a este hombre, ahora de 58 años de edad y residente en Cartagena, porque el delito ha prescrito, especificándose en la sentencia de dicha Audiencia que "es indudable el carácter especialmente odioso de los hechos enjuiciados y declarados probados y el reprobable comportamiento del acusado. Pero no podemos condenarlo porque el delito prescribió y por tanto, debemos declarar extinguida, por prescripción, su responsabilidad penal".
Es demencial, es injusto que un animal de este calibre quede libre, pero la Ley es la Ley y la pobre niña demoró demasiado tiempo en denunciar, el tiempo que necesitó para enfrentarse a sus fantasmas de la infancia y tener el suficiente aplomo como para denunciar al monstruo que dañó su vida.
Después nos quejamos cuando algun@ se toma la Justicia por su mano.