Submitted by jorge on Wed, 06/07/2011 - 08:15
Miércoles, 6 de julio
Con la paliza que le dieron la otra noche al Bacilo no ha terminado la historia. Porque esta mañana, el muy tolai, solicita hablar con el subdirector de seguridad. Y por extraño que parezca, aunque dadas las circunstancias, no es de extrañar, el subdi aparece al par de horas por el patio, rodeado de dos jefes de servicio y de un funcionario de nuestro módulo.
Muchos caminamos a esta hora por el patio, el Bacilo entre otros, pero cuando aparece semejante comitiva, de inmediato se forman grupos de cuchicheo. Y llaman al menda a consulta. Todos miran, de reojo unos, otros de frente, preguntándose en que terminará todo esto.
El Bacilo y el de seguridad conversan en un aparte. Por el movimiento de manos y la intensidad de los gestos, no parece que el tema tenga una salida fácil.
Al rato, y cuando ya se han marchado los mandamases, unos cuantos se arremolinan alrededor del Bacilo en pos de la información; nosotros no, a nuestro grupillo me refiero; hubiéramos quedado como unos pringaos. Para eso contamos con algunos machacas voceras, de esos que todo lo saben y todo lo cuentan. Preciso. A los veinte minutos, el Guarín se acerca con las buenas nuevas.
Parece ser, que el Bacilo comentó con el subdirector de seguridad los hechos acaecidos la noche anterior, haciendo especial hincapié en la paliza que le propinaron un funcionario y su jefe de servicios. Que quería denunciar el tema ante el Juez de V.P., pero antes tenía que garlar con él, por si éste decidiera tomar medidas contra los jichos. En lugar de eso, el subdi le amenazó con denunciarlo por intento de suicidio y por amenazas a los funcionarios, todo ello bajo los efectos de algunos psicotrópicos prohibidos. Por último, le soltó, que para dar el tema por zanjado, le iba a conceder un vis a vis extra al mes. Con esto el problema quedaba en tablas, según dijo el gicho mayor. El Bacilo se lo pensó durante unos minutos, y como taleguero viejo que es, optó por tomar la opción fácil, ya que la complicada se tornaría imposible.