Submitted by jorge on Tue, 23/05/2017 - 06:24
El abogado de Francisco Granados solicita al Juez de Instrucción que reduzca la fianza de su defendido de 400.000 a 120.000€, ya que a la primera cantidad impuesta, supuestamente, no puede hacer frente, no así a los 120.000 que él propone, que reuniría entre los muchos “amigos” con los que cuenta.
El truco de la rebaja de la Fianza es bien conocido en prisión.
En ocasiones, los Jueces Instructores no solo imponen al Preventivo una Fianza para evitar que escape, también lo hacen con el fin de seguir el rastro del dinero o de la garantía que se deposite por dicha Fianza, en especial, en casos donde los imputados han birlado dinero y lo tienen a buen recaudo en algún paraíso fiscal o en una cuenta de un testaferro familiar, allegado o amigo y, así, si alguien del entorno del detenido deposita dicha cantidad, el Juzgado comienza a husmear el rastro.
Por lo tanto, si a alguien que permanece en prisión le imponen una Fianza elevada y cuenta con el dinero, máxime, si éste se encuentra oculto, lo más sensato para él es esperar, ya que si pasado el tiempo “no puede hacer frente a dicho pago”, supuestamente, con habitualidad el Juez comienza poco a poco a reducir dicha cantidad, hasta que al cabo de varios meses el montante es lo suficientemente aceptable como para pagarlo y no llamar con ello la atención.
Granados, harto de estar en prisión, unos 2 ½ años y ante la necesidad de pisar calle, no se ha cortado un pelo y en lugar de esperar a que los 400.000 euros de su Fianza vayan siendo reducidos por el Juez de manera gradual, lo pide descaradamente y haciendo una oferta.
Y nos jugamos una cena con quien quiera, que antes de 2 meses, quizás 1, el Juez reducirá la cantidad a los 120.000€ propuestos por Granados.
Hagan sus apuestas, señores y señoras.
