Submitted by jorge on Tue, 26/06/2012 - 08:37
No hay que viajar en el tiempo ni en la geografía para encontrarse casos similares.
El lavado de cara que busca Ikea renegando de su pasado, del crecimiento descomunal de su emporio, en parte, realizado a base de subcontratas con mano de obra presidiaria de la antigua República Democrática de Alemania y de Cuba, la podemos encontrar, con tintes más democráticos pero de concepción similar, en nuestro país con los talleres productivos que empresas particulares instalan en las prisiones españolas y donde los presos perciben un salario muy por debajo del Salario Mínimo Interprofesional.
Y el que dude de esta afirmación no tiene más que indagar en las nóminas pagadas a los presos por sus labores en talleres o revisar la normativa instruida por el Ministerio de Trabajo relacionada con la política laboral en prisiones.
No estaría demás, que sintonizaran la 107.0 FM este viernes 29 a las 21 horas, para escuchar la entrevista que nuestro programa realiza a Valeriano Gómez, ministro de trabajo del PSOE en su última etapa de la novena legislatura y donde asevera desconocer esta situación irregular.
¡Hay que denunciar esta irregularidad!, termina diciendo el ex ministro.