Submitted by jorge on Thu, 24/09/2020 - 06:26
Ya tuvo un Juicio por la misma causa y llevado a cabo por la misma Audiencia Provincial de Zaragoza, pero dada la sentencia tan reducida que obtuvo por un crimen de semejante gravedad, 5 años de prisión, el Tribunal Superior de Justicia de Aragón lo anuló aduciendo que la sentencia no había sido motivada y ordenando repetir el Juicio.
Se trata del “crimen de los Tirantes”, acaecido el 8 de diciembre de 2017 y en el que el joven Rodrigo Lanza se enfrentó en un pub de Zaragoza a Víctor Laínez, de 55 años, por unos tirantes que este cargaba con la bandera española y por lo que fue valorado por el primero como un “fascista y facha”, motivo por el que lo agredió y por el que Laínez murió días después en el hospital.
Ahora, después de la repetición del Juicio con Jurado, han sido 20 años los sentenciados por la misma Audiencia por un delito de Asesinato agravado por Motivos Ideológicos. Entre otros, se ha demostrado, que la víctima no portaba ninguna navaja ni produjo lesiones de ningún tipo al agresor tal como aseguraba la defensa del condenado, y fue éste el único que realmente agredió y, en consecuencia, asesinó al hombre de los tirantes.
El abogado defensor, Endika Zulueta, recurrirá la sentencia ante el TSJA, asegurando que hubo "multitud de violaciones de los derechos fundamentales durante la vista" y, en caso de que este tribunal no estime el recurso, llegará al Tribunal Supremo, al Constitucional y, en última instancia, al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
No ha sido un caso al uso, y dejando al margen los posiciones ideológicas en la que cada cual se posicione -en la del agresor o e el de la víctima-, la primera sentencia carecía de lógica tal y como presentaron el caso, ya que uno no agrede y mata a otra persona por su posición ideológica o el intercambio de algunos insultos y es condenado a solo 5 años, pero tampoco comprendemos las motivaciones que llevaron al Tribunal a suspender la primera sentencia por una coletilla tal como “no haber sido motivada”.
Para finalizar, estamos convencidos que esta última sentencia no va a ser revisada a la baja por ninguna de las instancia judiciales superiores a las que se va a recurrir, aunque es lógico que el abogado, después de este varapalo, trate de enmendar el golpe recibido.