Submitted by jorge on Thu, 09/01/2020 - 06:26
Nos topamos con historias que de cuando en cuando nos sorprenden por lo extravagante y demencial de los casos y, lo que es aún peor, en esta a la que nos referimos, por haberse mantenido oculta durante años, a pesar de la incongruencia de la situación.
En la provincia de Santa Fe, Argentina, una mujer de 32 años ha denunciado después de 23 años de silencio, haber sido violada por su padre desde los 9 años, cuando apenas era una niña y la madre se había fugado del hogar. Fruto de estas violaciones, la hija engendró 4 hijos de su padre, actualmente de 20, 17, 13 y 9 años de edad, que aún viven en la misma casa con su madre/hermana y su abuelo/padre.
Aseguró que no había denunciado el caso con anterioridad por miedo y por mantenerla en casa en un estado de semilibertad, pero que se decidió a denunciar por la edad avanzada de la mayoría de sus hijos y por miedo a que su padre les pudiera maltratar.
Al hombre, de 57 años, lo han detenido por abuso sexual con agravantes a la espera de los resultados del ADN a fin de contrastar la paternidad del imputado, y por tenencia ilícita de arma, ya que mantenía dos pistolas guardadas en la casa.
Nos produce tanto rechazo este hecho y, a su vez, una pena tremenda por esta niña/mujer, que no podemos llegar a comprender su situación ni los horrores vividos.
Y qué decir de este degenerado, que ha mantenido a 5 seres indefensos en unas condiciones antinatura, librándose durante más de dos décadas de un castigo que ha de ser ejemplar, además del que ya le proporcionaran sus nuevos compañeros de penal.