Submitted by jorge on Fri, 22/12/2017 - 06:43
Ahora ha saltado a la palestra, y a raíz de la detención del asesino múltiple Norbert Feher, alias Igor el Ruso o Igor Vaclavic, un exmilitar de origen serbio, qué si el módulo de Aislamiento de la prisión de Teruel no era seguro y el de Zuera sí, y otros tantos comentarios al respecto de la seguridad que han de tener las prisiones para presos de esta índole.
En España, la mayoría de las prisiones cuentan con módulos de Aislamiento construidos exprofeso para presos peligrosos, presos FIES (Fichero de Internos de Especial Seguimiento) o aquellos que han cometido faltas graves en módulos normales y se les envía durante días o semanas a uno de Aislamiento.
Lógicamente los antiguos penales (Burgos, el Dueso, etc.) y las cárceles viejas (Alcalá Meco, Herrera de la Mancha, etc.), no cuentan con la modernidad en la construcción y la tecnología como las que tienen las macrocárceles actuales (Picassent, Zuera, Estremera, etc.), pero si poseen dichos módulos adaptados a este tipo de presos, por lo que es exagerado comentar que solo están seguros en algunas prisiones de nuestra geografía, ya que a no ser que acudiera al rescate de uno de estos presos un comando de las antiguas fuerzas de combate de la Guerra de los Balcanes o algo similar, un interno pudiera escapar de un módulo de Aislamiento.
Otra cosa son las agresiones que pueda cometer contra otros internos o funcionarios, aunque esto también es complicado, ya que en todos los módulos de Aislamiento los presos viven solos en sus celdas, salen 1 o 2 horas a un patio -de reducido tamaño y con concertinas y alambradas en su perímetro interior- y de manera individualizada, y no tienen contacto con nadie, salvo con la persona que acude como destino de office (comidas) o como destino de economato, aunque ninguno de estos tiene contacto directo con los aislados salvo a través de una rendija rectangular por donde pasan la bandeja de las comidas y los artículos de economato.
Tampoco es fácil el contacto con los funcionarios, dado que en los módulos automatizados, todas las compuertas se abren electrónicamente y las órdenes se articulan por megafonía interna. En algunos módulos más viejos, aún se abren las puertas manualmente y se comunican a través de la rendija, pero estas son los que menos.
Algunos presos aislados pueden recibir comunicaciones (visitas) de familiares y realizar algunas llamadas, pero otros, debido a su delito, condena, orden judicial o peligrosidad, no.
Por lo tanto, el tal Igor el Ruso puede permanecer en cualquier módulo de Aislamiento que se haya construido a tal fin, nadie peligra por ello y el riesgo de fuga es mínimo.
Que no nos cuenten batallas ni películas tipo “Con Air”.