Submitted by jorge on Tue, 02/12/2014 - 10:01
Se asesinan entre sí antes y después de los partidos de fútbol y en las manifestaciones ultras del color e ideología que sean, siendo la violencia su característica aglutinante, ya que carecen de unos principios básicos, del verbo y de la educación para utilizarlo.
Pero lo “gracioso” del tema es que una vez entran en prisión, mantienen el mismo comportamiento agresivo, intimidador y aniquilador que en la calle, con la diferencia que han de encontrase más de dos en un módulo para seguir sus pautas callejeras.
Sí solo ingresa uno de ellos en el patio, pierde toda su hombría y agresividad, en especial, cuando se encuentra a un pobre yonkie o portador del VIH, sus enemigos acérrimos, de esos que no tienen nada que perder y carecen de la fuerza para hacerles frente, pero no de la habilidad para manejar un pincho, quizás infectado con alguna sangre enferma.
En manada son valientes y arrogantes, en la soledad, unos pobres desgraciados.
http://www.farodevigo.es/deportes/2014/12/01/deportivo-alerto-policia-autobus-grupo/1142057.html