Submitted by jorge on Mon, 24/02/2020 - 06:26
Los estudios demuestran que la mayoría de los Abusos Sexuales a menores ocurren en el entorno cercano al niño, dentro de la misma familia, amigos o vecinos.
De ahí que sea tan difícil que el menor abusado denuncie el caso, ya que el agresor juega con la ventaja de la relación cercana que cohíbe y avergüenza al agredido y que le provoca una sensación de culpabilidad.
En este caso, una niña de 12 años de Morón, Argentina, se había sobrepuesto a esta situación inicial y comenzó a comentar el caso con sus compañeras de colegio a la vez que les reproducía unos audios que grababa cuando era agredida sexualmente por su tío.
Una madre de un compañero habló con los padres de la niña pero estos no la creyeron argumentando, "estas cosas no pasaban en familias como la suya”, sin embargo, los profesores se pusieron en contacto con un centro psicopedagógico especializado en este tipo de abusos.
Ante la negativa de los padres de aceptar los hechos y aprovechando unas obras en casa, la niña instaló una cámara espía y así logró demostrar los abusos de manera contundente, lo que provocó la huida del tío que se encuentra actualmente en paradero desconocido.
Después de los análisis realizados a la niña, la Fiscalía apoyada por los exámenes médicos y psiquiátricos, sospecha que estos abusos se llevaban realizando desde hacía 6 años, es decir, desde que la menor contaba 6 años de edad, y cuyo resultado fueron los problemas derivados de ello como el orinarse encima y las dificultades mostradas en el aprendizaje.
Es llamativo observar la cerrazón que tienen muchas familias por motivos sociales, religiosos u otros para aceptar que dentro del núcleo familiar se puedan dar estos casos que, como ya comentamos, es el lugar habitual donde se producen.