Submitted by jorge on Wed, 06/07/2016 - 06:48
El Tribunal Supremo desestima el recurso de un Brigada de la Guardia Civil que fue condenado por el Tribunal Militar Central suspendiéndole de funciones por posar junto al cadáver de un huido de la Justicia y que él, junto a su compañero, abatieron durante la persecución.
Y el muy arrogante, no contento con capturar y matar a la “presa”, se deja fotografiar por su compañero posando junto al cadáver y colgando la foto en Whatsapp con el título, “AHÍ STA. FIAMBRE".
Se trataba del cuerpo de Rafael R.G. “que contaba con numerosos antecedentes policiales y fugado el anterior día 21 de enero del Centro Penitenciario de Badajoz tras disfrutar de un permiso penitenciario, a quien con posteridad a ese día se le atribuían dos homicidios consumados cometidos en las provincias de Toledo y Badajoz, y otro homicidio intentado y un secuestro perpetrados en la localidad de Plasencia".
Estos antecedentes, si fueran ciertos, no son ni de lejos motivo para, primero, matar a un ser humano y, segundo, fotografiarse junto a él como si de una presa de safari se tratara, y con un epígrafe de tan mal gusto.
La sanción no solo es adecuada, sino necesaria, y tal como consta la sentencia, se trata “de una falta grave consistente en la observancia de conductas gravemente contrarias a la dignidad del Cuerpo”.
