Submitted by jorge on Fri, 05/04/2013 - 08:10
La noticia versa sobre el embargo de los bienes que realizará el juez de instrucción a la filicida que congeló a sus bebés recién nacidos.
El motivo del embargo como tal no nos interesa, ni tampoco queremos hacer alharacas tremendistas por ser bebés las víctimas del crimen, tan solo deseamos entender el motivo que puede llevar a una madre, supuestamente, a asfixiar a sus hijos y congelarlos como si fueran pavos de Navidad.
Conocemos muchas mujeres, innumerables madres, y la mayoría tienen impregnado de manera indeleble el gen de la maternidad. De ahí que nos sorprendan crímenes de esta índole.
¿Qué le ha podido llevar a una madre a realizar tamaño acto? ¿Tan desesperada era su situación personal, matrimonial, económica, laboral, que descargó su frustración en sus hijos recién nacidos?
No acabamos de asimilarlo, y de ahí que pensemos que le impongan la condena que le impongan, esa mujer ya está muerta, muerta en vida.
Por ello, el cumplimiento de su pena no debería de realizarse en prisión, sino en uno de los hospitales psiquiátricos penitenciarios existentes, al igual que muchos otros presos que pululan por los patios de las prisiones españolas en lugar de cumplir su delito derivado de su enfermedad psíquica en un emplazamiento adecuado.
http://www.elmundo.es/elmundo/2013/04/04/andalucia_sevilla/1365079584.html