Submitted by jorge on Fri, 22/03/2013 - 07:31
Con un 21,8% de la población española viviendo en una pobreza relativa y un 6,4% en pobreza severa, no nos extraña que el índice de delincuencia, esa que denominamos de delitos menores, se incremente con la misma facilidad que lo hace la miseria.
Porque la gran mayoría de los presos internados en las prisiones españoles se encuentran ahí por delitos menores, de esos tan habituales como el robo, el hurto, el camelleo, el consumo de drogas y el alcoholismo vinculados al hurto y al atraco para la adquisición del vicio, etc.
Y lo más triste de la situación por la que transita nuestro país, es que a medida que crece el colectivo de pobres aumenta a su vez la riqueza de los más pudientes, inclinándose la balanza de la clase media de manera peligrosa del lado de la pobreza, relativa, pero pobreza.
Esperemos que el Gobierno no reaccione a este hecho como es habitual, a toro pasado.
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/03/20/actualidad/1363816774_200137.html