En la historia del ser humano, cada tanto en tanto aparece un pseudo Robín Hood que toma “prestado” lo de algunos para repartirlo entre los otros.

Claro, y esa acción los catapulta al estrellato mediático, donde todos hablan del hecho y del incitador del mismo, bien, mal o peor, pero lo trascendente, que hablen de uno.

Y hablando del pájaro en cuestión y siendo este Alcalde de una población andaluza, por lo que cuenta con unas obligaciones políticas, sociales, morales y, por ende, personales, es la persona menos adecuada para adaptar la Ley a su conveniencia.

También podría deshacerse de sus propiedades y objetos, y con lo recaudado, realizar la compra de productos de primera necesidad y llevarlos al Banco de Alimentos en el que ha depositado los carros sustraídos a los supermercados.

Por esta regla de tres, ¿qué ocurriría, si los cinco millones de parados existentes en España decidieran por las buenas entrar en los establecimientos y llevarse el género como una “expropiación alimentaria”?

http://www.elmundo.es/elmundo/2012/08/08/andalucia/1344459809.html