Bretón tiene los días contados en prisión, ya sea por su propia mano o por mano ajena.

Hay delitos que no se perdonan. Y este es uno de ellos. La gran mayoría de presos tienen hijos, y apenas disfrutan de ellos. Nos les cabe en la cabeza, que alguien que puede estar junto a los suyos sea capaz de asesinarlos e incinerarlos; no se entiende, no lo entienden.

En prisión están bien vistos los atracadores, los ladrones, los narcotraficantes, los falsificadores, hasta los asesinos –dependiendo del tipo de asesinato-, pero no se acepta a los violadores, a los pederastas, a los pedófilos, a los maltratadores, y bajo ningún concepto, a los asesinos infantiles, y parece ser, que Bretón lo es.

Por ahora lo mantendrán refugiado en el módulo de Ingresos, con salidas al patio cuando el resto de compis duerman la siesta, con dos internos de apoyo para evitar las autolesiones. Pero cuando sea juzgado por este delito y se le condene por ello, ¿en qué módulo, en qué cárcel lo mantendrán a salvo de él mismo o de sus compis?

Ni en los módulos suaves (internos de permisos, violadores, destinos) se podrá evadir de seguras amenazas, de posibles atentados, y menos, durante las décadas que permanecerá en prisión.

Su delito marca, y la gente no olvida.

http://www.20minutos.es/noticia/1578096/0/breton/mas-vigilado/medicado-antifaz/