Submitted by jorge on Thu, 08/11/2012 - 07:37
Durante los últimos días no dejamos de escuchar a través de los medios de comunicación todo lo relativo al accidente acaecido en el Madrid Arena, y por desgracia, lo concerniente a la muerte de las chicas.
Y todos los posibles culpables, directa o indirectamente, echando balones fuera y señalándose entre si con ese dedo acusador que los cobardes esgrimen cuando, debido a su negligencia, ocurre una tragedia.
Que si se lanzaron petardos, que no contaban con una autorización en regla, que el aforo se había superado, y bla, bla, bla, la misma cantaleta de siempre.
Pero lo verdaderamente preocupante es el hecho, que esta empresa, Diviertt, avalada por Pedro Calvo, concejal delegado de Economía del Ayuntamiento de Madrid, incumplía todos los requisitos para ejercer de promotora de estos eventos, y contaba con 51 incidencias judiciales y administrativas, tres embargos y un riesgo de impagos del 100%, además de deber al Estado 26.000 de euros, según los datos confirmados por el propio Ayuntamiento.
Este es el quid de la cuestión, ya que cualquier entidad que se encuentre en una situación financiera adversa, hará lo que esté en sus manos a fin de salir del agujero, y esto incluye, saltarse a la torera todos los controles, medidas de seguridad y cualquier impedimento que reduzca la entrada de dinero.
¡Después pasa lo que pasa!
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/11/07/madrid/1352291859.html