No nos gusta. No nos agrada que la gente venda sus desdichas. Pero lo que nos asquea, es que las tergiversen, que mientan.

La historia de la norteamericana Amanda Knox está cargada de contradicciones:

Primero la condenan a 26 años por el asesinato de su amiga Meredith Kercher en Italia, de los que cumple 4 antes de que revoquen la sentencia, presionada Italia quizás por el Gobierno de los Estados Unidos.

Posteriormente regresa a su país para enterarse en marzo de 2013 que el Tribunal Supremo Italiano anula la absolución anterior y remite el caso de nuevo a otro Tribunal. Ahora se encuentra a la espera de un nuevo Juicio.

Mientras, ha publicado su Autobiografía, que entre otras lindezas comenta, que fue golpeada durante los interrogatorios y, que posteriormente, en la cárcel italiana, trataron de violarla y/o la violaron unos funcionarios con la colaboración de otra presa.

Esto, por supuesto, crea el morbo necesario para aumentar las ventas del libro, pero, ¿qué persona en su sano juicio puede plantearse por un momento, que una detenida norteamericana en Italia, apoyada por su Gobierno y cuyo caso es mediático, es maltratada durante el interrogatorio y posteriormente sufre tres intentos de violación?

¡Pura patraña!

http://www.lavanguardia.com/sucesos/20130501/54371697584/amanda-knox-interrogatorios.html