Por fin recibimos buenas noticias relacionadas con la curación de un de las mayores epidemias existentes en las cárceles españolas: la Hepatitis C.

Se trata de un nuevo cóctel de medicamentos ya ensayados y que parece que en el 90% de los casos la curación estará garantizada.

El gran problema radica en su precio, ya que las dosis necesarias para el tratamiento de cada paciente superará los 100.000 euros.

Por ello, la única posibilidad de hacerse con el tratamiento será a través del Instituto Nacional de Salud, que aún no ha tomado la determinación de cómo afrontar los costes de este medicamento a fin de que se pueda recetar en la Sanidad Pública.

Y que mejor lugar que las prisiones para comenzar a aplicar dichos tratamientos, dado que una parte importante de los internos están infectados por este mal, muy propagado en el mundo de la drogadicción, y tal como se comenta, “se trata de una enfermedad identificada hace relativamente poco y que se transmite por la sangre —tiene muchas similitudes con el VIH—, y en España se calcula que puede haber hasta 900.000 infectados, aunque hasta un 70% no lo sepa. Esta enfermedad puede permanecer latente mucho tiempo, y luego producir cirrosis o cáncer hepático”.

Una nueva luz al final del túnel, túnel en donde muchos reclusos quedan por el camino.

http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/02/19/actualidad/1392816442_298651.html