Submitted by jorge on Mon, 17/03/2014 - 07:52
Rafa Zouhier ha cumplido su condena integra, sin redenciones, por su colaboración en los atentados del 11-M.
Desde la prisión se le ha conducido en un vuelo a Tánger, expulsado de España, fuera de Europa, a pesar de haberse casado con una española, por lo que la misma expulsión ha sido irregular.
Sin embargo, dada la gravedad del hecho por el que Zouhier fue condenado, opinamos que esta fórmula, aunque irregular, tenía cierta razón de ser.
Pero esto no elimina el problema, ni mucho menos, ya que este personaje ha mantenido en prisión sus lazos con los movimientos yihadistas, y una vez en libertad en Marruecos, conseguir nueva documentación y otra identidad es para estos grupos coser y cantar.
No nos extrañe encontrarnos cualquier día y de manera inesperada con Rafa Zouhier caminando por las calles de Madrid, París o Berlín, con melena y gafas oscuras y atendiendo al nombre de Muhammad Almizri, por imaginar un nombre, ciudadano egipcio y residente en Londres.
La amenaza de la Yihad no desaparece con una simple expulsión, solamente se traslada unos meses en el tiempo y lugar geográfico.
http://politica.elpais.com/politica/2014/03/16/actualidad/1394953781_946398.html