Submitted by jorge on Thu, 15/09/2016 - 06:51
Qué sencillo es para algunos colarse en el mundo de las Finanzas aprovechándose del apellido aristocrático y los contactos de PAPI.
Pero PAPI, Jaime Bermúdez de la Puente Gonzalez del Valle, conde de Castelo, a no ser que mueva bien el culo, las relaciones y se rasque el bolsillo que quizás ande también algo agujereado, no podrá evitar el ingreso en prisión de su nene, Alfonso Bermúdez, que ya con 30 años comenzó a moverse por los círculos familiares vendiéndose como el Gurú de las Finanzas, el Agente de Inversión de la Jet y la Aristocracia Española.
Así, desde 2005, comenzó a manejar dineros ajenos pero cercanos, de esos amigos de papá de toda la vida que depositaron en sus manos ahorros y la "calderilla sobrante" que posteriormente, allá por el 2012, comenzaron a reclamar ante los comentarios maledicentes de que el nené gastaba en exceso y la advertencia de los bancos que los dineros no se encontraban en las cuentas o que las sociedades creadas a tal fin eran inexistentes.
Fue entonces cuando saltó la liebre, se supo de la estafa en cadena que Alfonso había montado por valor de 6 millones de euros y cuando comenzaron a caerle las demandas por parte de los amiguísimos.
Ayer, 14 de septiembre, comenzó el juicio por estafa contra Alfonso Bermúdez de la Puente Sánchez Aguilera, hijo del Conde de Castelo, que a sus 41 añitos se enfrenta a una petición de 6 años de prisión más las subsiguientes indemnizaciones.
Veremos como acaba la cosa y si las amistades de sangre azul son tales y retiran las demandas contra el hijo del Conde.