Submitted by jorge on Fri, 03/03/2017 - 06:51
No es la primera ocasión que escribimos sobre la locura que se ha apoderado del Presidente de Filipinas.
Y nos es que la locura se haya adueñado de la mente de Rodrigo Duterte así, de repente, sino que el problema viene de lejos, de cuando este caballero, antes de acceder al sillón presidencial, era Alcalde de Manila.
En los últimos años ha emprendido una guerra sin cuartel contra los narcotraficantes y camellos, evitando su detención, fomentando su asesinato y pagando recompensas a los agentes de policía que realizan las ejecuciones, sin recibo, sin talones, en efectivo y sin preguntas, solo por las cabezas cercenadas, no por los detenidos.
Así han caído durante los últimos años unos 1.000 narcos mensuales, pero siempre de edad adulta, si a partir de los 15 años en adelante se puede considerar edad adulta.
No contento con ello, ahora está tratando de sacar adelante una nueva Ley que reduzca la edad de responsabilidad criminal de los 15 a los 9 años, con el fin de encontrar más dianas humanas para sus agentes, aunque el Presidente lo disfrace con el argumento de querer “enseñar responsabilidad al pueblo para impedir el florecimiento de una generación de criminales”.
Bonita manera de ejemplarizar a un Pueblo.
Y a este demente ninguna Corte Internacional le pone coto: los países lo critican, sus otros homólogos lo vapulean dialécticamente, pero nadie hace nada y, él, sigue aniquilando culpables, aunque sigan siendo seres humanos.
http://www.elconfidencial.com/mundo/2017-03-01/duterte-quiere-que-matar-a-ninos_1340471/
