Submitted by jorge on Wed, 17/01/2018 - 06:43
El Hotel Ritz-Carlton de Riad, Arabia Saudí, ese que desde noviembre de 2017 se había convertido en cárcel de lujo para decenas de altos cargos y príncipes afines al régimen saudí, un total de 201 y que cayeron en desgracia por una campaña anticorrupción emprendida por el príncipe Mohamed Bin Salmán para tratar de recuperar 86.000 millones de euros, supuestamente defraudados, se reconvertirá desde el 14 de febrero de este año de nuevo en hotel.
Desde hace semanas los nobles detenidos en el lugar han ido abandonando la “cárcel-hotel” después de que dichos imputados aceptaran reconocer su delito y devolver hasta el 70% de sus bienes. Y todo ello debido al daño de imagen que estas detenciones han supuesto para el país, máxime, cunado los inversores internacionales han reducido sus inversiones en Arabia Saudí cuando el país más lo necesitaba debido a la diversificación de su economía y la concreción de importantes planes financieros.
La reapertura del hotel como tal se realizará el 14 de febrero, aunque aún no se pueden confirmar las reservas y los teléfonos tampoco están operativos, según el departamento de Comunicación de Marriott, propietaria de la marca Ritz-Carlton.
De todos los detenidos, la mayoría ha salido con pactos extrajudiciales, abonando las cantidades antes mencionadas, pero alguno prefiere ir a juicio antes que pagar, tal es el caso del príncipe Al Waleed que se ha negado a pagar los 6.000 millones de dólares que le exigen.
Cuando se habla de cifras de ese volumen, poco o nada puede hacer la Justicia, ya que todo se pacta bajo mesa.