Submitted by jorge on Tue, 24/07/2018 - 06:43
… que varios funcionarios de la prisión de Navalcarnero hayan sido atacados por un interno.
Primero, porque se trata de una de las peores prisiones de Madrid en cuanto al estado de las instalaciones y a la Junta de Tratamiento con la que cuenta, poco dada a mantener un contacto “normal” con los internos, además de dar escasas concesiones en cuanto a Permisos y 3º Grados se trata, por lo que ya existe un mal precedente y, por ende, mal ambiente en dicha prisión.
Segundo, el interno atacante estaría en tratamiento de Metadona y consumiría algún fármaco o droga adicional, ya sea Tranquimazine o Cocaína o cualquier otro producto que generara un revuelto propio de cuadros de agresividad extrema como el ocurrido, porque para arrancar la oreja a un funcionario y dejar a otros dos también heridos, se le ha tenido que ir la pinza, y esta reacción es propia del consumidor/mezclador de sustancias legales e ilegales.
El pretexto del robo de la Radio por parte de su antiguo compañero de celda solo ha sido el detonante para arrancarse en un totutm revolutum de golpes y mordiscos y, como él se negaba a entrar con el resto de compis del patio al comedor, solo pudo atacar a quien tenía a mano: a los funcionarios que fueron a buscarlo para que abandonara el patio.
Lo ocurrido no nos extraña ni por la prisión ni por el tipo de reacción, salvo que rara vez se meriendan la oreja de un funcionario, más bien se lían a golpes o a pinchazos con el primero que pillan.