Submitted by jorge on Wed, 16/09/2020 - 06:26
La prisión de Picassent puede que sea la mayor de Europa, por lo que no es de extrañar que asimismo sea en una de las que mayores problemas o, por lo menos, incidentes surjan.
De ahí que este lunes pasado apareciera uno inesperado, aunque previsible en opinión de los Funcionarios de dicha prisión.
Un Interno de 36 años, considerado conflictivo por haber amenazado a varios Funcionarios, haber instigado a sus compis a realizar plantes y peleas y catalogado dentro del fichero F.I.E.S (fichero interno de especial seguimiento), era especialmente vigilado por sospecharse que trapicheaba con Droga dentro del centro.
Aunque por ser F.I.E.S. ya se le realizaba un control diario dentro de prisión, a este, en especial y dada su conflictividad y supuesta actividad de tráfico, se le comenzó a rastrear los movimientos y analizar las posibles entradas de la Droga que recibía de la calle.
Y así se llegó a la conclusión que dado el poco contacto que mantenía con Internos que salían de Permiso y las muy escasas Comunicaciones que recibía del exterior, lo más probable es que fuera su abogado el que, posiblemente, la introdujera, ya que lo visitaba periódicamente y lo había visitado con anterioridad en las prisiones de Murcia y Algeciras, donde ya residió el Interno con anterioridad, además de tener vínculos familiares con él.
Por ello, cuando este lunes el abogado comunicó con su defendido, los Funcionarios se mantuvieron al acecho; una vez terminada la visita, el abogado entregó unos documentos para que su cliente pudiera examinarlos, a lo que el Funcionario respondió que examinarían dichos documentos antes de entregarlos al Interno.
El letrado perdió la compostura y solicitó que se los devolvieran, que había cometido un error con los documentos entregados, pero mientras este alegaba, el Funcionario encontró camuflado entre dichos papeles un envoltorio con 14 gramos de Heroína, la cual fue decomisada y el abogado fue detenido por la Guardia Civil que custodia el perímetro carcelario.
Siempre se ha sabido que la entrada habitual de la Droga a las cárceles son los regresos de Permiso de los Internos y los Vis a Vis Íntimos, pero qué un abogado se arriesgue a realizar semejante locura y quedar proscrito en el gremio y, por ende, encausado en un sumario por Tráfico de Estupefacientes, nos parece de una insensatez e inmadurez que solo podemos entenderlo si éste hubiera estado amenazado o amedrentado por su representado y los lazos familiares que los unen, ya que en caso contrario, no lo llegamos a concebir.
