Submitted by jorge on Fri, 13/11/2020 - 06:26
Después de una semana de noticias nefastas, negativas y tristes, no está mal despertarnos este viernes con una información, quizás, con un tinte humorístico, aunque lo que conlleva el trasfondo de dicha noticia contenga su gravedad.
A estas alturas todos sabemos como entra la Droga en prisión y como se distribuye detrás de los muros.
Un recordatorio:
• La Droga la introducen en la cárcel los Internos que regresan de Permiso, “empetada” en su ano.
• Asimismo, lo hacen las familias y las parejas de los Internos cuando acuden al Vis a Vis, habitualmente, “empetada” en la vagina de ellas.
• La Droga se mueve en prisión entre módulos lanzándola de un patio a otro amarrada a una pila de transistor.
• Asimismo, la distribuyen ciertos Internos que trabajan en Destinos exteriores al módulo y que se mueven en el recinto interior de la cárcel (Economato, Cocinas, Sociocultural, Polideportivo, etc.)
Estos son los conductos habituales para entrar y distribuir la Droga en prisión; hay algunos más pero son los menos utilizados.
Lo hilarante de la noticia de hoy es que la semana pasada, en la periferia de la prisión de Tenerife II, en el municipio de El Rosario, los agentes de la Guardia Civil que realizaban el control exterior de la prisión en compañía de Funcionarios de Instituciones Penitenciarias, detuvieron en el exterior de la prisión a un hombre de 30 años que estaba lanzando un par de pelotas de tenis y unos paquetes con Droga (80 gramos de Hachis) y unos mini teléfonos móviles.
Al hombre en cuestión le ha sido imputado un delito contra la Salud Pública y puesto a disposición judicial.
Bueno, la gracia de la noticia estriba en el modo de introducir Droga y teléfonos en la cárcel, sistema poco habitual pero que se ha practicado en alguna que otra prisión con éxito.
