Submitted by jorge on Wed, 05/01/2022 - 06:45
Sí, terminamos el 2021 con una Pandemia desmedida y sin control, y una agresividad igualmente desmedida e increscendo en nuestras prisiones.
Todos los reportes recibidos este fin de año sobre la situación de las prisiones en España y Cataluña (el País Vasco aún no ha tenido el tiempo de realizar análisis de este tipo), indican un aumento considerable de la agresividad en los últimos 2 años en nuestras cárceles.
Entre otras, por ejemplo, la del Diputado del PSC-Units, Rubén Viñuales, que ha llamado la atención a la Consellera Lourdes Ciuró, asegurando que se ha dado “un aumento del 500% en las agresiones a Funcionarios en los centros penitenciarios. Día sí día también tenemos noticias de algún funcionario de prisiones que ha sufrido una agresión”.
Por otro lado, a mediados de diciembre y en el Centro Penitenciario de Tahiche, Lanzarote, un Interno residente, inexplicablemente, en un módulo de Pre-respeto a pesar de que había agredido con anterioridad a otros compañeros, le cortó, sin previo aviso, la cara a otro compañero que estaba hablando con los Funcionarios, desde el lóbulo de la oreja hasta la mandíbula, y todo ello con una tapa de lata de mejillones; el agredido tuvo que ser atendido de urgencia en la Enfermería del Centro y después trasladado a urgencias del Hospital de la ciudad donde le aplicaron 23 puntos de sutura, quedándole marcada la cara, presumiblemente, de por vida.
Asimismo, en la prisión de las Palmas II, 2 Internos de 26 y 23 años y condenados por delitos de Robo con Violencia y residentes en un módulo de Multirreincidentes por ser autores de anteriores altercados, incendiaron los colchones de su celda, por lo que tuvieron que ser ingresados en el Hospital con quemaduras de diversa consideración, mientras los Funcionarios que les salvaron la vida ingresaron a su vez por asfixia debido a la cantidad de humo que inhalaron.
Estas son algunas de las acciones que se han dado este fin de año además del cómputo que están realizando las diversas Administraciones Penitenciarias, pero lo que está claro, es que debido a la Pandemia, la agresividad en prisión se ha elevado a niveles desconocidos hasta el momento y, por lo que podemos observar y debido al crecimiento de los contagios en el exterior, de puertas adentro no solo no se va a solucionar el problema a corto plazo, sino que de seguro aumentará, mientras las Autoridades no refuerzan el número de Funcionarios, y menos, el de Médicos y personal Sanitario.
Veremos a donde apuntan las siguientes estadísticas.