LOS FLORIDA 44
Submitted by jorge on Fri, 10/09/2010 - 08:19
No concedía tiempos de reacción ni a unos ni a otros, y cuando algunos de ellos recibían las órdenes oportunas de, “comprueben, entren” o “cogedlo, matadlo”, ya habían desaparecido entre nubes de polvos, unos por un lado, otros por otro, y todos en ascuas de a ver quién vino y quien se fue.